RETO MÓDULO 3


RETO 3. POLÍTICAS PÚBLICAS PARA LA IGUALDAD DE OPORTUNIDADES.



Buscando e indagando en lo que sucede en mi comunidad de residencia, la Comunidad Autónoma de Madrid, me ha parecido interesante la Campaña “¿Te cuidas? Hábitos de vida de las mujeres en la Comunidad de Madrid. Por unos hábitos saludables”. Aquí os dejo el link: estudio_habitos_mujer_2016_web_v1.pdf (comunidad.madrid)
Esta campaña está impulsada por la Consejería de Políticas Sociales y Familia, y coordinada por la Dirección General de la Mujer. Se integra dentro de la Estrategia Madrileña para la Igualdad de Oportunidades entre Mujeres y Hombres 2018-2021, que actualmente se encuentra en la Prórroga de 2024. Su link es el siguiente: prorroga_estrategia_igualdad_2024_def.pdf (comunidad.madrid)
Dicha estrategia, se centra en varios ejes. En el que me quiero fijar es en el EJE ESTRATÉGICO 4, SALUD, DEPORTE Y HÁBITOS SALUDABLES. Dentro de este eje estratégico, encontramos dos objetivos generales:
Potenciar la incorporación de la perspectiva de género en las políticas de salud, que comprende los siguientes objetivos específicos:
Adecuar la atención de las mujeres a sus necesidades de salud durante todo su ciclo vital
Impulsar la promoción de la salud y la prevención de las enfermedades
Fomentar la igualdad de género en el deporte y promocionar la actividad física por las mujeres, con estos dos objetivos específicos:
Promocionar, favorecer e incrementar la actividad física y participación femenina en todos los ámbitos del deporte.
Impulsar, facilitar y aumentar la profesionalización de las mujeres en todos los ámbitos del deporte.
Creo que esta campaña se incluiría en el objetivo general que marco en rojo: potenciar la incorporación de la perspectiva de género en las políticas de salud. Una de las medidas propuestas es la número 74: “realizar acciones de apoyo y promoción sobre estudios relativos a mujer y deporte con la producción de elementos divulgativos de los mismos”
El Eje 4 de actuación ha sido dotado con un presupuesto de 33.827.923.44€, 4.815.918.92€ para este año 2024.
Por contar un poco en qué consiste este estudio, se comentan aspectos demográficos de nuestra comunidad autónoma, características de salud en relación con el género, bienestar psicológico y hábitos de vida de la mujer.
Las mujeres constituyen en la CAM el 52.8% de la población total (3.366.473 de 6.464.078 habitantes), siendo más numerosas a partir del tramo de edad 25-29 años. Además, la esperanza de vida al nacer de las mujeres es de 86.63 años (frente a los 81.20 de los hombres).
En cuanto a las causas de muerte según el sexo, en mujeres son más importantes las enfermedades del sistema circulatorio, seguidas de tumores y las del sistema respiratorio. Sin embargo, en los hombres, las más importantes son los tumores.
Estudiando las enfermedades neuropsiquiátricas, se llega a la conclusión de que la prevalencia-vida para la población española es más alta en la mujer que en el hombre, excepto en los trastornos asociados al consumo de sustancias.
Además, del hecho del género, otro factor socio-demográfico que resulta determinante es la ocupación: son más comunes las depresiones en personas incapacitadas, seguidas de las que trabajan en el hogar, las jubiladas y las desempleadas, por este orden.
 
 



El estudio señala que durante el embarazo y tras el parto, se dan cambios hormonales que pueden afectar a la mujer (depresión postparto), y también pueden darse cambios alrededor de la menopausia (depresión durante la menopausia). Esto puede repercutir en la propia mujer, así como en sus relaciones familiares y sociales. También se presta atención a los patrones de sueño, y como estos afectan a la salud. 
Además, están los trastornos alimentarios. Es el género femenino el que más dietas hace, intentando cuidar su alimentación. La industria de la belleza y moda perpetúa el rol de “mujer perfecta”, físicamente hablando. 
Otro apartado de este estudio son los hábitos de vida de la mujer, tanto en alimentación, como en actividad física, como en prácticas no saludables, y el tiempo dedicado para distintas actividades (cuidado personal, trabajo remunerado, estudios,  vida social, deporte…). Como se ve en las gráficas, en cierto modo, existe la influencia del rol de género:

 

 
 


 

Al final, podemos confirmar un reparto desigual de las responsabilidades de cuidado y de las tareas del hogar entre varones y mujeres, siendo ellas las que realizan más trabajo dentro del hogar.
Las conclusiones que saca este estudio son las citadas a continuación:
“Paradoja de la mortalidad”. Siendo más longevo el sexo femenino, éste tiende a padecer más enfermedades, frecuentemente crónicas, y a más temprana edad. Esto influye en su calidad de vida.
Algunos patrones en la vida sana están cambiando: las mujeres cada vez llevan una alimentación más sana, y tienden a realizar algo de actividad física, aunque se ve un aumento en el consumo de alcohol a edades tempranas.
El deporte que practican las mujeres suele ser individual, y en menor proporción que los hombres. A veces, lo cambian por caminar.
“Doble jornada laboral”: trabajo remunerado y cuidado de familia.
Mayor frecuencia de trastornos psiquiátricos entre las mujeres.
En base a estas conclusiones, se dan una serie de recomendaciones, incidiendo en los hábitos saludables que se deberían fomentar:
Cuidar la prevención de enfermedades, sobre todo de aquellas patologías específicas de la mujer.
Dieta sana y equilibrada, favoreciendo que los horarios sean adecuados, sin prisas, sin malas posturas.
Practicar ejercicio físico de forma regular.
Cuidar el bienestar psicológico.
Para lograr todos estos objetivos, se puso en marcha una campaña denominada ¡Cuídate!, para manifestar la necesidad de las mujeres de apostar por los hábitos saludables de conducta. Aquí pongo link al vídeo: madrid.org/media/mujer/cuidate_mujer.mp4
Estos vídeos son interesantes porque educan a la población en los hábitos saludables. Es importante recordar, también desde la publicidad, qué acciones influirán en estar bien. En este caso, la población diana son las mujeres, porque se ha visto durante el estudio que son las más desfavorecidas en su propio cuidado. Esto sería por un rol de género, en la que el género femenino ha sido educado en ser cuidador, descuidando su propia vida y salud. Por ello, una campaña así trata de educar y enseñar a la mujer que no debe olvidar su propia salud e integridad.
Mi opinión, es que otras medidas concretas favorecerían este autocuidado, complementando este tipo de campañas informativas. Se me ocurren como ejemplo, exámenes médicos específicos distribuidos por rangos de edad (campañas de cribado), subvenciones en los centros deportivos de la comunidad para las mujeres, oferta de actividades deportivas dirigidas a las necesidades propias (embarazo, menopausia, realización de fuerza). 
Podría ser necesario, que al finalizar esta estrategia en la prórroga de 2024, se volvieran a estudiar todos los indicadores utilizados esta vez, de una forma comparativa, para conocer si los objetivos perseguidos se consiguieron. 
¡Pronto lo veremos!



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